El desapego de las abejas

El mayor ejemplo de desapego nos lo dan las abejas.

Después de construir las colmenas las abandonan.

Y no la dejan muerta, en ruinas, sino viva y repleta de alimento.

Dejan toda la miel que fabricaron de más, sin preocuparse con el destino que tendrá.

Levantan vuelo hacia su próxima morada sin mirar para atrás.

En la vida de las abejas encontramos una gran lección.

En general el hombre construye para sí, piensa en el valor de la propiedad, ambiciona conseguir más bienes, sufre y pelea ante la inminencia de perder aquello por lo que «luchó» por conseguir.

«Donde esté nuestro corazón, allí estarán nuestros tesoros…»

Por lo tanto, no puede haber Paz donde los pensamientos y los sentimientos forman una telaraña que atrapa al ser en lo que considera suyo.

Esta telaraña no lo deja alzar vuelo hacia nuevas moradas.

Y dicho impedimento vale tanto en la vida como en la muerte.

Prisionero en un plano denso, pierde oportunidades de experiencias superiores.

La lección de las abejas está en su espíritu de donación.

En un acto poco común de desapego, abandonan lo que les llevó una vida construir.

Simplemente lo sueltan sin preocuparse por el destino que tendrá.

Dejan lo mejor que tienen, sea para quien fuere, lo cual es muy distinto de donar lo que no tiene valor o dirigir la donación a nuestros preferidos.

Si queremos ser libres, si queremos dejar de sufrir por lo que tenemos
o por lo que notenemos, debemos abrigar un único deseo:

Transformarnos

El ejercicio consiste en tener siempre presente que nada ni nadie nos pertenece, que no vinimos al mundo para poseer cosas o personas, y que debemos soltarlas.

De modo que, cuando algo o alguien tiene que irse de nuestra vida, no alimentemos la ilusión de pérdida.

Adquirimos una visión más amplia.

El sufrimiento llega cuando nos aferramos a algo o a alguien.

El apego empaña lo que debería estar claro: por detrás de una supuesta
pérdida se esconde la enseñanza de que está por llegar algo nuevo y mejor para nuestro crecimiento.

Y si no renunciamos a lo viejo, ¿Cómo puede haber espacio para lo nuevo?.

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8 comentarios en “El desapego de las abejas

  1. Patricia Diaz Leòn dijo:

    PDL
    Comparto la enseñanza de las abejas, tenemos que liberarnos de este mundo de la forma, material, no apegarnos a lo tangible, trabajemos en alcanzar nuestra felicidad, espiritual, paz, porque eso si perdura.
    vaciar el vaso, desaprender, para aprender, romper paradigmas.
    Bendiciones

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  2. mildred Chavarría dijo:

    El reino de Dios si es para todos, no es simplemente filosofía como comentan. Dios existe, es real. Nos ama y no debemos ser egoistas.

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  3. Jose fernando Bustamante dijo:

    No se quien se invento eses cuento
    Las abejas solo dejan el panal como dicen cuando sienten un peligro inminente, inundaciones. fuego etc
    Por lo demas aman y protegen su morada como cualquier animal ya que es parte de su habitat y de su modus vivendi.
    Proteger lo propio es intrinseco a los animales y en especial a la raza Humana como parte de su supervivencia, abandonarlo ante el peligrolo ratifica.
    Ojo pues con aquellos que quieran que te desprendas de lo tuyo para entra a disfrutarlo, con el cuento de que en el reino de los cielos todo es de todos, nadie conoce el reino de los cielos ya que EL es una filisofia u modo de vida pero no una situacion terrenal comparable. Latierra es una cosa, el Reino de los cielos es una Filosofia.

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  4. Jose Luis dijo:

    Si pones en practica cada una de las enseñanzas que nos deja este mensaje aprenderemos a desatranos de esas cosas que estorban nuestra vida personal y estaremos entrando a una renovacion radical… claro que si…

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  5. Todas las cosas fueron creadas por Dios, entonces todo es Dios. Y lo que es de Dios es para todos sus hijos, y los que es de los hijos es del Padre.-

    Nadie expresar esto es tuyo, o esto es mio porque todas las cosas pertecen al Padre y a los hijos del universo.

    Saludos

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